GRAFOLOGÍA

La Grafología es una ciencia basada en la observación e interpretación de la escritura manuscrita. En ella todo cuenta: la forma, el tamaño, el espacio, la inclinación de las letras, la presión aplicada, los márgenes, etc. Su objetivo principal es el de estudiar, comprender, describir y explicar los múltiples aspectos de la personalidad de quien escribe. Escribir no es tan solo un acto mecánico de movimientos de la mano, sino que es el resultado de la voluntad de representar gráficamente una idea o concepto que se trasmite desde el cerebro. Éste genera y dirige los impulsos motores necesarios del acto de escribir. Al principio, cuando aprendemos a escribir, domina el acto consciente. Una vez que la enseñanza finaliza, y el manejo de la escritura es más ágil, predomina el subconsciente.

La persona, desde el subconsciente, al escribir y dibujar expresa su forma de ser, pensar y actuar; expresa lo que es, el temperamento natural, aquello que le caracteriza y le define. Refleja también sus sentimientos, la naturaleza de sus emociones y su estado de ánimo, así como su inteligencia y sus aptitudes profesionales. Es más, con el estudio de la escritura, la firma y la rúbrica, se conoce cómo es uno y como se muestra ante los demás.

Con un estudio grafológico es posible diagnosticar la situación psíquico-física del individuo en ese momento, ayudándole a tomar consciencia de sus limitaciones, habilidades y su actitud. A partir del resultado de dicho estudio y a través de una rama específica de la Grafología, denominada Grafoterapia, es posible reeducar la escritura, modificar algunos de sus trazos y de sus letras con el objetivo de reconducir la personalidad, las emociones o estados anímicos del paciente, llegando a mejorar alteraciones de su conducta, a aumentar la autoestima, a superar la timidez e incluso a potenciar la memoria. En definitiva, optimiza las facultades mentales del individuo, su funcionamiento orgánico y el modo como gestiona sus emociones, ahora bien, siempre y cuando el paciente esté abierto a aceptar dichos cambios.

Si traes un texto escrito y firmado de tu puño y letra, podré analizar qué aspectos necesitas mejorar para sentirte bien con los demás y contigo mismo.